Antecedentes históricos

Los países europeos que han empezado a emigrar a otras regiones desde los comienzo del siglo XIX, se calcula que, hasta el año 1932 emigraron unas 80 millones de personas. Los países asiáticos estaban prácticamente aislados del contexto mundial, empezaron a movilizarse primero los chinos en el año 1840. Mas tarde con la restauración del Imperio Japonés con el Emperador Meiji que dio lugar la apertura del país al mundo exterior, partieron en el año 1886 para Hawai, los primeros emigrantes japoneses, previamente acordado entre el Emperador del Japón y el Rey Kalakua de Hawai.

Era una época en que hubo también varias emigraciones por contratos para tareas especificas y guiados por algún representante extranjero como una forma de dekasegi actual. Esta forma emigratoria no era del agrado del gobierno del Japón y ejerció un control sobre ellos para que tengan la seguridad de contar con el pasaje de vuelta.

Para tal efecto se creo el Departamento de General de Emigración en el año 1891 con el Vizconde Takeaki Enomoto. En ella establece la absoluta necesidad de un agente que encargasen de los inmigrantes y que sean de origen japonés o representante de alguna compañía comercial de los japoneses con contratos previos y que estén en permanente contacto con algún Consulado o Legación japonesa Para establecer de esta manera la debida protección a los inmigrantes.

Con la firma de “Acuerdo de Caballeros” en el año 1907, suscrito entre los representantes de Washington D.C. y Tokyo se prohibió la entrada de inmigrantes japoneses en los Estados Unidos de Norte América y limitado en Canadá. De esa manera, las emigraciones de japoneses se tornaron casi en forma exclusiva a la América Latina.

Sin embargo esta postura anti-asiática impulsada por los Estados Unidos tuvo su repercusión en el continente americano y en forma especial en el Paraguay, cuando el Gobierno paraguayo en su Articulo XIV de la Ley de Inmigración del año 1903 prohibe la entrada de inmigrantes de la raza amarilla y negra en el Paraguay. Al respecto algunos historiadores como el caso de Carlos Pastore comentó que mientras otros países han abiertos sus puertas, Paraguay cierra sus puertas al progreso.

Es interesante estudiar las posturas dispares de los gobiernos de América Latina de la época. Mientras que países como Brasil, Mexico y Perú admitían a los orientales, sin restricción. Argentina y Cuba restringían indirectamente por lo que preferían los inmigrantes blancos europeos, otros países como Uruguay, Chile, Guatemala, y Venezuela, sumando a Paraguay prohibieron por cuestiones estrictamente raciales

Aquí se puede analizar el tema del “Crisol de la Raza”, es decir la preferencia de la raza blanca y la expansión de la cultura y educación europea, como un modelo civilizatorio ideal de la raza humana, mediante la imposición cultural y religiosa para la formación de caracteres y desenvolvimiento humano sobre la tierra. Por otra parte se había percibido que, el sentimiento nacionalista latinoamericana como principal factor de discriminación , de tal manera que, la admisión de los orientales era para obtener la mano de obra barata y no como inmigrantes que habrían de formar parte de la nacionalidad

Con este criterio, se había iniciado la conquista de las Americas, reduciendo a la situación de marginalidad a los habitantes originales, los indígenas de las Americas y cuya categoría sigue vigente. Recién desde finales del milenio pasado se observa los esfuerzos que los indígenas están realizando para reivindicar sus presencias y derecho en estas tierras….

¿Cómo habría sido el continente americano si estuviese “colonizado” por orientales?

Situación actual en el Paraguay

Con la apertura de las relaciones diplomáticas entre Paraguay y Japón en el año 1919, la prohibición de la entrada de inmigrantes de la raza amarilla, ha excluido a los japoneses de esa calificación, y ambos gobiernos acordaron en el año 1936 la entrada de las primeras 100 familias japonesas en forma experimental para la cual se han establecidos reglamentos que habrían de cumplir ambas partes. Así mismo el Ministerio de Emigración del Japón estableció reglamentos específicos para los emigrantes al Paraguay

Desde entonces, no se percibe una discriminación aparente entre estas dos etnias, salvo de algunas reacciones esporádicas e individuales de nacionales que consideran a los orientales como seres diferenciados y tratan de evitar que accedan a cargos de relevancia política y social. La mayoría poblacional admiran a los japoneses y a los profesionales Nikkei que contribuyen eficazmente al desarrollo del país en el área de la agricultura y agroindustria, así mismo al comercio como seres dotados de virtudes humanas y de responsabilidades

La influencia en el mundo actual de sistemas: neoliberal y el capitalismo europeo repercutió de alguna manera a los comerciantes Nikkei con el afán de enriquecimiento y de influencia en el ambiente, gozar de una buena vida, y con suficiente recursos en el banco y de un confort de vida como un parámetro ideal y real para obtener un prestigio social en el ambiente.

Por otra parte se observa las antiguas solidaridades y virtudes humanas que se venía practicando a través de los años desde su venida del Japón como un paréntesis temporal que quedó como un sello distintivo, especialmente en las colonias japonesas.

A manera de reflexión

El nuevo milenio ha hecho su entrada cerca de siete años atrás con mucha esperanza para la humanidad toda, sin embargo, la crisis humana ataca con mas ferocidad dentro del ambiente global, la discriminación étnica y cultural persiste en el ambiente, donde la competencia y la adquisición de poder entra en juego. Se ha tratado de superar la idea de lo racial por el término “étnico” y se denomina etnias diferenciadas con una nueva valoración y categorización en cuanto al contexto global.

Cuál sería el papel de los Nikkei en este contexto. La generalidad se mantiene en un nivel socio-económico intermedio, y medio alto. No les afectó la pobreza ni la crisis económica de la América Latina. Conserva en su mayoría la cultura y la disciplina heredada de sus ancestros japoneses, sin involucrar en los problemas mundiales ni locales. Sin embargo, es necesario retomar la posición de liderazgo Nikkei que se ha empezado surgir en los años ochenta y noventa, justamente ahora, cuando la crisis del comportamiento humano, sobre todo en la América Latina es la causante del tremendo deterioro social, económico y político.

Nuevos líderes con valores éticos de los Nikkei se hace necesaria en estas circunstancias y es hora de aunar esfuerzos para trabajar por una América mejor. Somos miembros de una comunidad panamericana. Y en los países panamericanos estan nuestro hogar, nuestra amada patria y la esperanza del futuro.

Le invito a reflexionar sobre el párrafo que esta inserto en este trabajo ¿Cómo habría sido el continente americano si estuviese “colonizado” por orientales?

Como Nikkei.
Como panamericano.
Como ciudadano del mundo

© 2006 Emi Kasamatsu