Mi vida, nuestra vida: el presente, el pasado y el futuro
En esta vida somos protagonistas de muchas historias, pero en muchas situaciones, los actores permanecen desconocidos porque no se registraron sus memorias.
Mis abuelos maternos y paternos nacieron y vivieron en Osaka y en Tokio, hasta la década del treinta, cuando llegaron al Brasil para trabajar en las plantaciones de los caficultores.
Sizuyo, mi madre, ahora de 89 años, es la única memoria viva de su familia y también de mi padre. Cuando cumplió 70 años, expresó su deseo de registrar las memorias de la inmigración al Brasil y los tiempos difíciles que vivieron para que sus descendientes tuvieran conocimiento …